Ódiame,ódiate y abandonemos el mundo pasando una vida en una habitación en ruinas con la banda sonora de tus noches de verano y mis tardes de invierno...

martes, 26 de julio de 2011

Un redoble, por favor.

Deliraba y pensaba, o pensaba y deliraba... que más da, el caso es que eran las cuatro de la mañana, y las notas salieron altas y claras de la pequeña radio que tenia a su lado,se le humedeció la cara y...sintió que no podía con el mundo,esa noche, no.

Es curioso como la mente elige estas pequeñas cosas para romperse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario